En qué basar nuestros precios:
A la hora de fijar el precio a cualquier producto o servicio existen 3 elementos básicos que tomaremos en consideración:
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1. Por una parte, los costes que la empresa debe cubrir, al menos para el conjunto del ejercicio económico.
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2. Por otro lado, está el precio por encima del cual el consumidor no demandará el servicio ya que estimará que se encuentra sobre valorado.
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3. Por último, es necesario actualizar constantemente la información relativa a la competencia para estar en los precios de mercado, ofreciendo un poco más al cliente que nuestra competencia por el mismo precio.
Política de ofertas
La política de ofertas seguirá un lema: una cama no vendida no se recupera nunca. Es decir, debemos utilizar inteligentemente la política de ofertas para conseguir el máximo índice de ocupación sin interferir en la estructura de costes fijos, ni en un posible deterioro de nuestra imagen de cara al consumidor.